Nace un bebé en el jardín delantero: una cámara de vigilancia filma un parto caótico
Calabasas (EE.UU.) - Lo que parece una experiencia dramática para la mayoría de las madres fue la realización de un sueño para la californiana Natasha Downing (34) : la estadounidense dio a luz a su segundo hijo sin comadrona ni médicos, justo en la puerta de su casa.

Completamente ignorante de lo que le depararía aquel día de finales de agosto, la mujer de 34 años había estado esa mañana con su comadrona, que le estaba practicando un desprendimiento de ovarios. En este procedimiento habitual, un obstetra separa con los dedos la cubierta externa de la bolsa amniótica de la pared uterina. El objetivo es inducir el parto de forma natural.
Sin embargo, Natasha no se dio cuenta de que esto ocurriría antes de lo esperado.
Poco después de la cita, la madre se puso de parto. Cuando empezaron cada tres minutos, Natasha informó a su comadrona, que vivía a solo 15 minutos.
Las contracciones no tardaron en volverse dolorosas y sólo había un minuto de intervalo entre ellas. A pesar de ello, Natasha y su marido decidieron esperar otros 30 minutos antes de desplazarse al hospital.
El bebé nace sin asistencia

Pero cuando la mujer de 34 años ya no podía mantenerse en pie debido al dolor, estaba claro que había llegado el momento de marcharse. De camino al coche, la futura mamá se dio cuenta de repente de que venía el bebé . "Sentí que mi cuerpo me empujaba hacia abajo", recuerda la estadounidense.
A duras penas llegó a la puerta de casa, donde se agachó en el jardín delantero. Allí rompió aguas y su pareja descubrió la cabeza del bebé. Entonces todo sucedió muy deprisa: mientras su marido llamaba de nuevo a la comadrona, su padre llamaba también a los servicios de emergencia. Pero tanto los médicos como la comadrona llegaron demasiado tarde.
Lilybella vio la luz del día sin su ayuda hacia las 18.25 horas. Afortunadamente, tanto la niña como su madre gozaban de buena salud a pesar del parto precipitado. Cuando por fin llegó la comadrona, Natasha acababa de expulsar la placenta.
A pesar de que el parto fue de todo menos planeado, la ahora madre de dos niños está exultante: "Fue todo lo que había soñado, todo lo que había querido para mis dos partos", dice Natasha feliz, según el Daily Mail.
"Parece que fue un parto traumático, pero fue muy sanador y realmente increíble".