Estados Unidos - En una publicación viral en las redes sociales, una joven lanza acusaciones contra la compañía aérea Southwest Airlines. Afirma que la echaron del avión por culpa de su gato.

En su post en X, Alex afirma que su gato expulsó algunas heces y orina debido a un aterrizaje brusco.

Su mascota Oni, de siete meses, había estado en una caja de transporte. Cuando hizo sus necesidades, Alex cogió unas toallitas de papel, lo limpió todo y luego tiró las toallitas sucias a la basura.

Los auxiliares de vuelo fueron amables y comprensivos, pero cuando Alex volvió a embarcar en el mismo avión tras la escala, se dio cuenta de que no habían cambiado la bolsa de basura.

Además, entretanto habían embarcado nuevos auxiliares de vuelo, que no estaban nada contentos con el olor del aseo y se sintieron obligados a cerrarlo.

Según Alex, una azafata fue especialmente grosera con ella. Tuvo que abandonar el avión de nuevo, acusada de tratar el aseo de a bordo como una bandeja de basura.

La sacaron fuera llorando y ella y su gatito fueron abandonados. Alex hizo público el incidente en Internet e hizo graves acusaciones.

Las directrices del sitio web de Southwest Airlines establecen que no se puede transportar a mascotas que muestren un "comportamiento perturbador". Esto incluye orinar o defecar en la cabina o en la zona de pasajeros.

Alex tuvo que esperar varias horas con su gato hasta el siguiente vuelo. Aprovechó el tiempo de espera para limpiar completamente a Oni en el aseo del aeropuerto. En el siguiente avión le aseguraron que no había hecho nada malo, y como compensación le dieron un vale para un próximo vuelo.

Southwest Airlines aún no se ha pronunciado oficialmente sobre el asunto.