Vermont (EE.UU.) - Se dice que algunos perros son bastante buenos guardando secretos e incluso convenciendo a sus dueños de su inocencia. Pues bien, el golden retriever "Rusty" de EE.UU. no es uno de estos amigos de cuatro patas. Afortunadamente, su dueño grabó su "fracaso" en vídeo e hizo feliz a todo Internet.

El hombre de Vermont sólo había dejado a su amigo de cuatro patas solo en el coche durante un rato, sin segundas intenciones. Pero Rusty aprovechó la pequeña oportunidad para cometer un acto vergonzoso: le dio un mordisco a las golosinas de su padre.

El dueño de Rusty se había tomado previamente un granizado. Había colocado el refresco medio congelado en la consola central como algo natural y lo había dejado allí cuando bajó un momento del coche.

Tiempo suficiente para que su perro le hincase el diente al helado.

A su regreso, el amo de Rusty se dio cuenta inmediatamente de que el refresco estaba vacío y de que el golden retriever se comportaba de forma extraña. "Rusty, ¿te has comido mi granizado mientras estaba fuera?", se le oye preguntar en el fondo del vídeo.

¿Y Rusty? Intentó mantenerse lo más tranquilo posible y miró a su dueño con total inocencia y desprevenido.

Pero Rusty no pudo mantener la guardia alta durante mucho tiempo y su expresión facial decayó. Una rápida mirada con el rabillo del ojo hacia su amo reveló que sabía exactamente de qué estaba hablando su dueño.

Y entonces recordó cómo condenar a su amigo de cuatro patas de una vez por todas. "Enséñame la lengua", le pidió al perro. Después de todo, se sabe que los granizados se mezclan con un color brillante que mancha la lengua o los labios al contacto.

Al principio, Rusty consiguió zafarse del firme agarre de su dueño mientras éste intentaba abrir la boca del golden retriever. Al final, sin embargo, el estadounidense lo consiguió y pudo echar un vistazo a la lengua del animal. Y tenía un color claro: azul. Igual que la bebida artificial del americano.

Aunque esta prueba fue suficiente para que el dueño supiera que el perro había estado comiendo la golosina prohibida, los usuarios de TikTok , donde se publicó el vídeo, dan completamente la razón al can. "Esto son pruebas circunstanciales en el mejor de los casos. Rusty es inocente", asegura un usuario. Otro argumenta: "Oh sí, el golden retriever con la lengua azul... una raza muy rara. Tienes uno bueno".

La inocencia de Rusty encantó, y con razón, a los espectadores: el clip fue visto más de 15 millones de veces en la plataforma.