EE.UU. - Fue una visión dolorosa. Cuando Tucker, un golden retriever, se dio cuenta el viernes de que habían tapado la piscina del jardín de su familia, se sintió profundamente ofendido.

En un breve vídeo que desde entonces se ha hecho viral en TikTok , se puede ver al perro macho junto a su querida piscina infantil y sin entender ya el mundo.

¿Qué había pasado? ¿Por qué no le dejaban bañarse?

Su dueña, Courtney Budzyn, intentó explicárselo a su mascota: "Tucker, no vamos a nadar. Es invierno", le gritó. Pero el perro no se dejó impresionar.

Miró a su dueña sin comprender, casi como ofendido.

"No sé qué más decirte, cariño. Entra y desayuna", volvió a intentar Budzyn, pero de nuevo cayó en saco roto. En su lugar, Tucker se limitó a inclinar la cabeza, con las comisuras de los labios hacia abajo.

"Me rompes el corazón", siguió suspirando su dueño.

A Budzyn le costó bastante convencer a su querido amigo de cuatro patas.

Después de seducirlo con comida por tercera vez, pareció que cambiaba de opinión y dejaba a un lado la lucha por su afición favorita, al menos por un rato.

"Buen chico", le elogió finalmente la joven mientras entraba trotando en la casa familiar, añadiendo con una sonrisa: "Lo siento mucho".

En pocas horas, el vídeo había recibido más de 70.000 clics y los usuarios reaccionaron con entusiasmo. Aunque sentían un poco de lástima por el animal, la mayoría sólo podía reírse.

Y Budzyn también pareció bromear con el sufrimiento de su mascota. Subtituló el vídeo con un irónico: "Aquí no hay piscina, sólo dolor".